La biofabrica de Ence en Navia mejoró en seguridad y desempeño medioambiental
Sus resultados en 2021 son quince veces mejores que la media del sector
La biofábrica de Ence en Navia ha cerrado el año 2021 con unos destacados resultados tanto en seguridad como en desempeño medioambiental, dos de las prioridades estratégicas de la compañía. Las dificultades que dejó el COVID-19, y al alza en el precio de las materias primas y la energía no han sido obstáculo para la empresa. Ence logró el certificado SURE de sostenibilidad de la biomasa, y la revalidación del sello Residuo Cero, de AENOR. Además, durante el año se han desarrollado diversos proyectos piloto de PSM (Process Safety Managemet), mostrando el compromiso de la compañía con la excelencia en seguridad.
En cuanto a seguridad, la biofábrica de Navia alcanzó datos hasta quince veces mejores que la media del sector de la celulosa y el papel. Este logro se ha reforzado con la consecución de la certificación ISO 45001 para sistemas de gestión de seguridad y salud en el trabajo, destinada a proteger a los trabajadores y visitantes de accidentes y enfermedades laborales.
Por otro lado, la compañía ha mantenido y reforzado las medidas de prevención frente a la COVID-19. Para ello, todo el equipo humano de Ence ha mantenido, y mantiene, unas estrictas medidas de seguridad para poder realizar su trabajo sin riesgo de contagio, como desinfección de espacios, distancia mínima de 2 metros entre trabajadores, portar mascarilla FFP2 -y guantes, en trabajos de proximidad- o realizar los cambios de turno de forma telemática.
Además, en todas las instalaciones de Ence se realizan test a todos los trabajadores, superando las 20.000 pruebas en 2021; y también se llevan a cabo auditorías diarias por parte del personal de operación y de seguridad del cumplimiento del protocolo Covid. La seguridad ha sido, desde el comienzo de la crisis sanitaria, una prioridad para la compañía.
En materia medioambiental, la biofábrica cierra el año con los menores índices de emisiones olorosas de su trayectoria, con una reducción de más del 50 por ciento frente a la anterior marca histórica. Se trata de un paso más dentro de compromiso de la compañía de alcanzar el olor cero de su actividad en Navia. También el impulso a la economía circular se mantiene, alcanzando una valorización de más del 97 por ciento de los residuos que generan las instalaciones.
Todo el esfuerzo del equipo de trabajo en la empresa, ha servido para alcanzar importantes logros, como las citadas certificaciones ISO 45001 en seguridad, SURE para la sostenibilidad de la biomasa que utiliza la planta en el proceso de generación renovable, Residuo Cero, e ISO 50001 de eficiencia energética. Además de eso, se suman así al resto de reconocimientos de la planta, que dispone desde el 2014 de la etiqueta ecológica Nordic Swan (ecoetiqueta oficial de los países nórdicos) y, desde 2019, de la Etiqueta Ecológica (Ecolabel) de la UE para el papel gráfico, para el papel tissue y los productos derivados del mismo, entre otras.