Kimberly-Clark se reinventa y invierte $1.500 millones en reorganización

Kimberly-Clark ha anunciado una reorganización en tres unidades de negocios, buscando simplificar sus operaciones y reducir costos. La compañía con sede en Irving, Texas, planea incurrir en alrededor de 1.500 millones de dólares en costos relacionados en los próximos tres años, con aproximadamente la mitad en efectivo, principalmente por reducciones de fuerza laboral.

Esta reestructuración ocurre en un contexto donde la empresa enfrenta una disminución en los beneficios debido a los constantes aumentos de precios y a la competencia de marcas blancas más económicas, afectada por la inflación. Al igual que sus competidores Procter & Gamble (PG.N) y Unilever (ULVR.L), Kimberly-Clark también está perdiendo espacio en los estantes de los minoristas.

 

Las nuevas unidades de negocios incluirán el negocio en América del Norte, el segmento internacional de cuidado personal y los negocios profesionales y de cuidado familiar internacionales. Anteriormente, la compañía tenía tres segmentos de negocios con subdivisiones geográficas.

Se prevé que la modernización de la cadena de suministro genere más de 3 mil millones de dólares en productividad bruta y 500 millones de dólares en ahorros de capital de trabajo. La transición a la nueva estructura organizativa se espera que se complete para fines de 2024, con ahorros proyectados de alrededor de $200 millones en ventas, generales y administrativos en los próximos años.

Kimberly-Clark también reafirmó sus objetivos anuales de ventas netas orgánicas y ganancias ajustadas, a pesar de no cumplir con las estimaciones del cuarto trimestre en enero y advertir sobre posibles volúmenes planos en el primer trimestre debido a débiles inventarios minoristas. Las acciones de la compañía subían un 1,5% antes de la apertura del mercado.