Hace un año el comercio se quedó sin papel en las estanterías
Covid-19 limitó la compra de bienes de consumo, se cancelaron las clases y se cerraron las barreras en Costa Rica
El 16 de marzo de 2020 el panorama mundial era muy diferente. Tanto es así que en este periodo en Costa Rica, el Ministerio de Educación Pública (MPE), anunció la suspensión de clases en los centros educativos públicos y privados del país y los compradores no tenían papel higiénico en los supermercados.
Recuerdas cuando las tiendas tenían que limitar el número de productos de un mismo tipo que una persona podía comprar?
«Conservas: máximo 3 por cliente», decían los carteles de las grandes cadenas de supermercados.
También había poco alcohol líquido y en gel, las mascarillas no eran obligatorias, pero había pocas unidades en todo el país. Los que los vendían cobraban una cantidad absurda por una unidad.
También se cerraron las fronteras con Nicaragua y Panamá, donde sólo podían entrar los costarricenses y los residentes. Esa medida sigue vigente, pero las fronteras aéreas están abiertas.
La compra excesiva de papel higiénico y otros productos básicos -como arroz y frijoles- hizo que cada vez más personas repitieran el comportamiento.
Hasta esa fecha, Costa Rica sólo tenía 41 casos positivos de Covid-19 en total, y no se habían registrado muertes asociadas al virus del SARS-CoV-2, que ha causado la muerte a miles de personas en todo el mundo.
Además de todo esto, llevamos un año aplaudiendo a los trabajadores de primera línea de Covid-19.
POR QUÉ COMPRAMOS TANTO PAPEL HIGIÉNICO?
Los expertos en psicología del consumidor aclaran que el comportamiento es «obviamente irracional», y un claro ejemplo de mentalidad de rebaño impulsada por las redes sociales y la cobertura informativa.
Cuando aparecen imágenes de estanterías vacías, la gente siente miedo y necesita actuar, aunque no sepa qué hacer.
El síndrome FOMO (de Fear Of MissingOut, o miedo a perder algo), es lo que se observa en muchas personas en crisis como Covid-19.
MÁS DE UN AÑO DESPUÉS…
Ahora, los estudiantes han vuelto a clases. Aunque no todo el mundo asiste a los centros de aprendizaje de forma presencial, muchas instituciones tienen la modalidad semipresencial, en la que también se asiste de forma virtual. Esto permite que haya menos estudiantes en las instituciones y, por tanto, garantiza una distancia social mayor.
Por otro lado, las mascarillas son obligatorias y están disponibles a precios muy accesibles de todo tipo, desde las desechables hasta las reutilizables. Las máscaras se han convertido en algo opcional y en un complemento.
La incertidumbre de aquella época hizo que los ciudadanos de todo el mundo sintieran miedo y ansiedad por lo que pudiera ocurrir, ya que se desconocían muchos detalles que ahora son de dominio público.
Además, Estados Unidos sólo tenía referencias de países europeos que estaban siendo gravemente afectados por el coronavirus.
No había fecha para la vacuna, los casos aumentaron gradualmente en el país y comenzó otra pesadilla: la crisis económica.
Despidos, cierres de empresas y comercios, inmuebles no alquilados, vuelos cancelados, reducción de la jornada laboral, suspensión de contratos laborales, restaurantes cerrados, estricta restricción sanitaria de vehículos y muchas otras medidas que golpearon duramente a todos los sectores económicos del país.
Ahora… Costa Rica experimenta un escenario alentador en cifras.
Aunque ya hay 209.093 casos confirmados en total, 241 hospitalizados y 2.862 muertos, las perspectivas son prometedoras.
Aunque confirman entre 300 y 600 casos diarios, la curva se ha ido aplanando considerablemente. Se ha alcanzado un pico y, de forma inesperada, las muertes y los casos diarios han comenzado a disminuir.
Cómo fue la pandemia para usted hace un año?